Maritza Rodríguez da otro matiz a “Perro amor”

Maritza Rodríguez da otro matiz a Perro amor

rosalina marrero-rodríguez / Enviada especial

Miami. En el amor todo se vale. Al menos eso dicen y alguien que parece tenerlo muy claro es Camila Brando, el personaje que representa la actriz colombiana Maritza Rodríguez en la telenovela Perro amor, que estrena hoy, lunes, a las 7:00 de la noche, por Telemundo.

Esta atractiva rubia se crió con su abuela Cecilia (Zully Montero) y su primo Antonio (Carlos Ponce), cercanía que poco a poco los convirtió en amantes perfectos.

Su regla: sexo sin sentimientos.

Es así como esta frívola y arrolladora mujer complacerá todas sus adicciones sexuales con el Perro, a la vez que mantiene a su esposo Gonzalo Cáceres (Rodrigo de la Rosa).

Su poco respeto hacia el amor es, precisamente, lo que menos le gusta a Maritza Rodríguez de su papel, no obstante, la divierte.

Yo entraría todo el tiempo peleándome con 'Camila'; pienso que uno tiene que apreciar lo que le dan, uno tiene que valorar mucho el amor y los sacrificios que hace la otra persona para ti, opina poco antes de comenzar a grabar en los estudios de Telemundo en Miami.

Pienso que el esposo que ella tiene, 'Gonzalo', es un hombre para amarlo, para respetarlo, para no perderlo y a ella le vale; ella es muy egoísta, ella piensa en ella y en su propio beneficio, agrega sobre la mujer que luego peleará por el amor del Perro con Sofía Santana, caracterizado por la también colombiana Sofía Domínguez.

La picardía, la frescura y falsa inocencia de Camila le ha permitido a la actriz darle otra cara a la mala de historia escrita por Juana Uribe.

La novela tiene un giro bien particular, porque no es la típica dramática, no es la típica mala y quise aprovechar eso para romper un poco con la villana que había hecho anteriormente, que era mucho más dramática, mucho más calculadora, mucho más pesada. Quise aprovechar para hacerla un poco más ligera, que la maldad fuera un poco más disfrutada, y en esta ocasión, 'Camila' me permitió eso, hacerlo pícara, juguetona, que se divirtiera ella mucho con las situaciones y jugar un poco con las dos parejas que ella tiene, que es 'Antonio' y su esposo, detalla la propietaria de una escuela de modelaje en su natal Colombia.

Maritza Rodríguez asume cada trabajo con miedo. Le horroriza no poder proyectar en pantalla la personalidad que se ha ideado para el personaje que le corresponda.

Cada vez que me entregan un personaje nuevo, es un temor, declara. Para adentrarse en él, hago muchas cosas; hay veces que investigo mucho, hay veces que me dejo llevar simplemente por lo que leo; en esta ocasión me dejé llevar por la naturalidad, quería una villana fresca, muy suelta, que hablara con las manos, muy sonriente, divertida.

Perro amor comenzó a grabarse en noviembre del año pasado y se extenderá hasta el mes próximo, según la artista.

Los cinco meses transcurridos se han traducido en desmayos, parálisis y otros síntomas de agotamiento para la coprotagonista quien, dice, ha trabajado hasta 16 horas corridas.

Yo pensé que la novela más fuerte que he tenido era 'Amantes del desierto', pero creo que ésta le ganó con mucha intensidad laboral, comenta.

La recompensa ha sido ser parte de un agradable equipo de talento -comunica- sobre todo el Perro, que, tras de cámaras, parece ser bueno.

Maritza Rodríguez contempla tomarse un descanso al terminar este melodrama, para luego cumplir con la última producción con Telemundo que estipula su contrato.